“Si ustedes bombardean nuestras ciudades nosotros bombardearemos las suyas", ha dicho Osama Bin Laden y el día de ayer Al-Zawahiri, el segundo en la jerarquía de Al-Qaeda, advirtió que habrá más ataques en Inglaterra. Por lo pronto, en cualquier momento regresarán a la universidad, al trabajo, a casa, varios de los que sobrevivieron y siguen en el hospital, lo harán sin una pierna, sin un brazo, sin una mano. Se dice que fueron los afortunados; claro, no imagino qué sentirán aquellos que, en el metro o en el camión, perdieron un hijo o una hija; tampoco imagino lo que sintió quien murió el 7 de julio, ni los y las que mueren en esas circunstancias cada día. Sí, “si ustedes bombardean nuestras ciudades, nosotros bombardearemos las suyas”, pero esa frase es muy abstracta. Mejor, si ustedes matan a la gente que entra en el metro y sube al camión para llegar a trabajar, haremos lo mismo; si ustedes tienen bombas mortales, bombas dentro de las bombas, proyectiles que duermen y esperan ...